domingo, 29 de abril de 2012

El secuestro



Hace mucho tiempo en una pequeña choza, en medio del bosque, vivía un señor que se llamaba Francisco. Él era viudo, tenía tres hijas  que le  ayudaban en la casa y dos hijos que le ayudaban en el trabajo vendiendo cerámica.
Un día la hija menor fue a comprar pan, como era muy guapa  unos forajidos la raptaron cuando regresaba por el camino del bosque. Como no regresaba la hermana mayor se preocupó y fue a buscarla, no la encontró y volvió a casa muy triste. Al rato vino el padre y sus dos hermanos y les contó todo lo sucedido. Decidieron salir a buscarla cada uno por un camino distinto del bosque, regresaron a casa y llamaron a la policía, todos se fueron a dormir muy preocupados menos Francisco, el padre. La hermana mayor oyó a su padre llorar, se levantó a consolarle y los dos se fueron a dormir.
 Al día siguiente Carmen, la hermana mayor, y Diana, la hermana mediana, hicieron el desayuno y le dijeron a su padre que se iban a buscar a su hermana pequeña.  Cuando estaban buscándola notaron algo raro, como si alguien les siguiera, pero no se preocuparon. Después fueron a buscarla por el pueblo, entonces vieron que efectivamente unos hombre les seguían,  pensaron ir cada una por una calle y juntarse en la plaza, pero iban dos y cada uno persiguió a una hermana. La hermana mayor iba un poco más deprisa y cuando se juntan las calles en la plaza la hermana mediana que iba detrás vio un saco y como siempre lleva su cámara de fotos hizo una foto al hombre con el saco. Al hombre que llevaba detrás, la hermana mediana le dio una patada y el otro se fue corriendo, pero claro la hermana mediana llevaba las fotos, fueron corriendo a casa y se lo dijeron a todos,  pero pensaron que no se lo iban a poner tan fácil, salieron todos de casa y fueron con mucho cuidado a enseñar las fotos a la policía. Cuando les enseñaron las fotos la policía les dijo que en uno o dos días tendrían a la niña porque esos hombres ya los estaba buscando la policía varios días, eran unos malhechores muy peligrosos, que estuvieran tranquilos que la encontrarían.
Al día siguiente la policía encuentra a los malhechores y a la niña, pero no pueden detenerlos. Durante todo el día la policía intenta cogerlos y a la noche por fin lo consiguen. Liberan a la niña, llaman a su familia, que acude rápidamente y le curan las heridas. Regresan todos a casa felices de estar de estar juntos, después de una terrible pesadilla.
Mi primer diploma litetario
 Con este cuento he participado en el VIII Certamen Literario del colegio público "Cristóbal Valera", mi cole. Me dieron este diploma por participar. En tercero de infantil gané el segundo premio con un dibujo del cuento de Caperucita Roja.

1 comentario:

  1. Unas hermanas tan intrépidas como tú. Me gusta. Me surge una duda: ¿y los hermanos no ayudaban en la casa? Mmmmmmm.....

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